Los mandos de Xbox de sello oficial varían poco en su forma pero más en prestaciones y apariencia. Es en esto último en lo que más se suele centrar Turtle Beach para los mandos baratos compatibles con Xbox, y el Afterglow Ignite sigue esa idea. Así que externamente es un modelo de diseño llamativo, pero al que por sus 50 euros de PVPR tiene todo lo que cualquier jugón podría necesitar en un mando, aunque no sea el mando perfecto.
Desembalado y características
El Afterglow Ignite de Turtle Beach llega en una caja de portada multicolor, pero dejando claro que es un producto oficial de Xbox. Así que además de funcionar perfectamente con esta consola, también funciona en PC, aunque en macOS no he conseguido hacerlo funcionar. Es un modelo de diseño xboxero estándar y de conexión por cable, que muchos lo prefieren frente a los inalámbricos, a la vez que los cableados son más baratos a mismas prestaciones.
Sea como sea, el mando llega metido en una bolsa y dentro de una bandeja de cartón reciclado. Junto a él se incluye un cable de tres metros de longitud forrado de plástico con un USB-A a USB-C, y un manual de instrucciones que incluye en su portado un QR para ir a la web de Turtle Beach para obtener más información del producto.
Como he dicho, el mando tiene un diseño similar al del mando de Microsoft, pero ligeramente distinto. Nada más cogerlo se nota ligerísimo ya que pesa en torno a los 200 g, lo cual no agradará a todos los jugones. Los mandos ligeros son mejores para largas sesiones de juego, pero se pierde cierta estabilidad en su manejo que puede notarse más en unos tipos de juegos que en otros.
El peso no es algo que me desagrade de entrada, pero tampoco lo veo ideal. Además que cualquier jugón de mando tendrá varios en su casa y cambiará entre ellos según el juego o el tiempo que vaya a pasarse delante de la pantalla. De momento no hay un mando que sea perfecto para cualquier género de videojuego y usuario.
La disposición de las palancas es la habitual asimétrica de Xbox. Las palancas en sí tienen un extra de rugosidad en torno a ellos, y tienen un poco más de tensión de lo que me gusta para jugar, pero nada malo porque es una cuestión de gustos. Los interruptores de las palancas son de efecto Hall, lo cual es lo esperable ahora mismo, aunque no agrade (nuevamente) a todo el mundo. No he notado problemas de uso en juegos como Cyberpunk 2077 o de construcción de ciudades como Surviving the aftermath, que me ha dado por jugar una partida nueva estos días.
La cruceta es de cuatro direcciones, no está mal, pero es mejorable y no es especialmente apta para juegos de lucha. La botonera es similar a la del Xbox Wireless, que no está mal en cuanto a sensación de pulsación. Por lo tanto, los botones incluyen interruptores tradicionales. La ventaja es que no hacen casi ruido por su pulsación. Algo así le pasa a los dos botones superiores, de superficie plana.
El plástico de las abrazaderas tienen un patrón para mejorar el agarre en ciertas situaciones, y resulta agradable al tacto. El agarre se verá perjudicado más por el bajo peso del mando, pero será también situacional. En la parte trasera están las dos levas o botones traseros, bien ubicados para acceder a ellos. Es algo que me resulta imprescindible.
También se verá los deslizantes que limitan el recorrido de los gatillos, que es otra característica útil cuando se cambie entre juegos de carreras donde se necesite gatillos progresivo y los de tiros donde se prefiere un accionamiento instantáneo de los gatillos. Eso lo he notado mucho en Cyberpunk 2077. Todos los botones son configurables en la aplicación Control Hub, junto a muchas otras características de los mandos.
En general me parece un mando de buen funcionamiento, y lo único que no me termina de convencer es la cruceta, aunque funcione bien. Al ser tan ligero da la sensación de más barato, en un mal sentido de la palabra, pero es lo contrario. Quizás no me guste del todo que los gatillos tengan cierta rugosidad, pero el limitador hace que sea un mando muy útil en juegos de tiros.
En las palancas, por su diseño, se va a acumular más de suciedad, y en solo un par de días ya tenía en ellas bastante suciedad del uso. La botonera incluye botones con interruptores normales, con cierta retención, pero no los he visto mal para un uso genérico. En ciertos juegos se puede preferir los microinterruptores, pero es un mando barato y cumple de sobra.
Frente al mando de Xbox de Microsoft, las palancas se nota que las palancas son más duras y que la botonera también. Prefiero el diseño de los gatillos del mando de Xbox por la ligera curvatura que tienen, pero los del Afterglow Ignite funcionan a la perfección, con misma sensación de resistencia a ser pulsados. En general son mandos muy parecidos con pequeñas diferencias en la calidad de botones, palancas y gatillos.
Programa de configuración
El programa de configuración usado con el mando es Control Hub, una aplicación que está disponible para Windows y Xbox. Teniendo en cuenta el PVPR del mando, y que su PVP bajará, está muy bien que tenga una, aunque es más bien gracias a la buena labor que PDP hacía en este sector, empresa que ahora está absorbida por Turtle Beach.
La aplicación se divide en dos conjuntos de opciones importantes, y otras menores. Lo primero a hacer nada más conectar el mando es instalar una actualización. No cambiéis ni siquiera de ventana mientras esté actualizándose. El primer conjunto de opciones son de diagnóstico en el que probar si las palancas o los gatillos, entre otros, funcionan correctamente.
El segundo conjunto de características permite configurar los controles. Eso incluye las zonas muertas de las palancas del mando —no por desgaste, que son de efecto Hall, sino porque el usuario prefiera tenerlas—, el volumen del micro, mezcla de chat y juego para Xbox, silenciar micro, el control de los cuatro motores de vibración, el recorrido máximo de los gatillos, o la iluminación ARGB.
No son excesivas opciones, pero son muchas más de las que se suele proporcionar con este tipo de mandos más bien baratos.
Conclusión
El Afterglow Ignite es un mando que destaca por precio, incluso a su PVPR de 50 euros. En un tiempo, cuando baje al del Afterglow Wave similar —o sea, algo menos de 40 euros—, puede ser de los mandos baratos más interesantes cuando buscas sus características y un mando ligero que se conecte por cable. La estética me ha gustado especialmente con su iluminación ARGB.
Un aspecto muy positivo es Control Hub. Los mandos baratos, incluso de la propia Turtle beach, no suelen tener programa de configuración. En este caso es que es un producto que realmente caía en el catálogo de PDP, ya prácticamente absorbida por Turtle Beach tras comprarla hace unos años, y por eso Control Hub es el programa de configuración de PDP. Es bastante completo, y para ser un mando barato no se le puede pedir mucho más.
Este mando no apelará a la mayoría de usuarios, pero aportando palancas de efecto Hall, dos levas y limitador de gatillo, con el clásico diseño de Xbox que además funciona perfectamente en PC, sí que apelará a muchos usuarios. Sobre todo los que quieren un mando de batalla que desgastar en ciertos tipos de juegos porque no supondrá una gran inversión. Hoy en día está perdiendo sentido gastarse dinero en un mando de 200 euros viendo lo que se está ofreciendo por incluso 50 euros.