Razer ha renovado el Blade 15 con nuevo procesador y tarjetas gráficas, sin cambiar realmente mucho el resto de características. Sigue midiendo 355 mm × 235 mm × 16.99 mm y pesa los mismos 2.01 kg, con una carcasa de aluminio en color negro que le da ese buen aspecto que siempre ha tenido.

El primer cambia es el procesador, que pasa a ser un Core i7-13800H de seis núcleos P y ocho núcleos E, y el segundo es la tarjeta gráfica, que puede ser una RTX 4060 o una RTX 4070. No se indica su configuración de consumo, pero mejora la cámara de vapor para dar más margen térmico al rendimiento del equipo.

Solo cuentan con 16 GB de DDR5-5200, que a estas alturas resulta escaso. Algunos juegos empiezan a pedir 32 GB, y solo dieciséis gigas es poca cantidad para darle un uso más profesional. Afortunadamente se puede actualizar la RAM para ponerle hasta 64 GB de DDR5 en dos módulos SO-DIMM. Pero por lo que cuestan, ya podían haberles puesto 32 GB.

La pantalla es bastante buena, de 39.6 cm (15.6 in) tipo IPS con una resolución de 2560 × 1440 píxeles, refresco de 240 Hz, tiempo de respuesta de 2.5 ms, cubre el 100 % de la escala de color DCI-P3 y tiene G-SYNC, además de Optimus y multiplexor. En la parte superior hay una cámara web compatible con Windows Hello.

Ahora hay dos Thunderbolt 4 en lugar de uno, así como tres USB 3.0, un lector de tarjetas SD, Bluetooth 5.2, wifi 802.11az, un HDMI 2.1, altavoces estéreo con audio espacial THX. Tienen 1 TB de SSD de tipo PCIe 4.0 ×4, pero incluye una M.2 2280 adicional para ponerle una segunda SSD de hasta 4 TB.

El precio del modelo con una RTX 4060 es de 2500 dólares, mientras que el modelo con una RTX 4070 cuesta 2800 dólares.