Motorola está cogiendo carrerilla este año en la presentación de nuevos smartphones y ahora le ha llegado el turno del Moto G7 Power. Es uno de los modelos que la compañía está produciendo íntegramente en la India, la nueva China para las compañías tecnológicas por los crecientes costes salariales del gigante asiático.

Está hecho de plástico como buen modelo económico, con una capa de protección a agua y polvo IP52, por lo que es básicamente ante salpicaduras. La pantalla tiene 16.5 cm de diagonal, bastante estándar en el sector hoy en día, siendo de tipo IPS y con una resolución de 720 × 1600 píxeles. Tiene una muesca superior para la cámara de 5 Mpx y ƒ/2.2.

El procesador es un Helio G25, uno de los dos modelos para «jugar a lo económico», parafraseando a MediaTek, presentados a mediados del año pasado y que se están popularizando en la parte baja de Android. Cuenta con versiones de 2 GB de RAM y 32 GB de almacenamiento, y de 4+64 GB. Incluye lector de tarjetas micro-SD de hasta 1 TB.

La cámara trasera es de 13 Mpx y apertura ƒ/2.0 que graba vídeo a FHD y 30 f/s, e incluye una secundaria de 2 Mpx y ƒ/2.4 para fotomacrografía. En la parte superior central de la trasera incluye un lector de huellas dactilares. Tiene una batería de 5000 mAh que se carga por un puerto USB 2.0 tipo C con 10 W (5 V y 2 A). Dispone de wifi 802.11 b/g/n y Bluetooth 5.0.

Su precio es de 7500 rupias por el modelo de 2+32 GB, o unos 86 euros al cambio directo sin impuestos. Se venderá en colores rojo coral y azul Tahití.

Vía: GSM Arena.