Cada vez es más habitual que en las casas solo haya portátiles para trabajar, pero hay ciertos trabajos en los que se mejora la productividad si se tienen más de una y de dos pantallas disponibles. Soluciones como el Triple Aero 15.6 Pro Max de Aura Displays lo que ofrece son tres pantallas adicionales a acompañar a un portátil con pantalla de unas 16 pulgadas o menos. El amplio espacio adicional para contenido vendrá muy bien a esos usuarios. Pero estas soluciones también tienen sus particularidades, aunque por precio suelen salir bastante rentables.
Desembalado
El Triple Aero 15.6 Pro Max de Aura llega en una caja blanca sin información sobre el producto, probablemente porque sea una muestra para prensa. Al abrirlo se verá el monitor debidamente protegido entre espumas y protegido por una bolsa de plástico. Se adjunta un manual de usuario, un cable USB-C, un cargador de 65 W, y un cable mini-HDMI a HDMI.
El triple monitor tiene una estructura de aluminio de buena calidad. Cada panel llega protegido por una lámina de plástico. A primera vista no hay problemas de diseño, y es fácil entender cómo se despliega, aunque el manual lo explica perfectamente. Se pone sobre una superficie, se levanta el módulo central con los tres paneles hasta que se enganchas unos soportes laterales, y luego ese módulo se vuelve a echar hacia arriba con lo que alcanzará su máxima altura. Luego solo hay que desplegar los paneles laterales, y listo.
En la parte inferior del monitor hay una toma USB-C para el cargador, un USB-C para mover de manera cómoda los tres paneles con un solo cable, y tres mini-HDMI para cada uno de los tres paneles por si se quiere usar cada uno con un dispositivo distinto. Por ejemplo, se le podría conectar una PlayStation o una Switch a uno de ello, pero eso implica que habría que comprar más cable mini-HDMI a HDMI para los otros dos paneles porque los cables no están incluidos. Alternativamente, si no se tiene un USB-C se puede conectar con un USB-C a USB-A y con un solo mini-HDMI a HDMI para mover los tres paneles desde un mismo dispositivo.
En esa zona inferior también hay cuatro botones, uno de encendido, y tres para moverse a través del menú. He tenido un problema de calidad porque inicialmente no sabía que eran botones. Posteriormente, tras mirar el manual, vi que tenían que serlo pero no se movían. Con la uña los intenté mover y se desatascaron funcionando ya como botones. Pero recurrentemente se han atascado, lo cual resulta supermolesto.
El diseño de los tres monitores es con unos marcos muy generosos, por lo que no abunda en un diseño minimalista del escritorio. Tienen prácticamente un centímetro de marcos, y entre cada panel hay tres centímetros de distancia.
Puesta en funcionamiento
Los monitores se pueden usar en Windows y macOS, salvo en la última versión macOS 26 porque no funciona en ella, al menos en un MacBook Pro con procesador Intel. En el resto sí me ha funcionado perfectamente, incluido con portátil con Windows 11 y un Mac Studio con macOS 15.
Para utilizarlos hay que instalar, antes de conectar los monitores al equipo, los controladores SM76x de Silicon Motion, que están disponibles para Windows, macOS, Android y Linux. No debería de haber problemas a la hora de usarlos con ningún dispositivo. No hay nada que configurar. Solo hay que instalarlos y el dispositivo reconocerá los tres paneles por separado, pudiéndose mover en la disposición de pantalla de la configuración del equipo.
Características
Los paneles del Triple Aero 15.6 Pro Max son de 39.6 cm (15.6 in) tipo IPS con una resolución de 1920 × 1080 píxeles, lo cual arroja una densidad de 142 PPP. A la distancia de uso de unos 60 cm, no dará problemas y en general se podrá usar incluso con un escalado del 125 % en Windows, frente al 150 % por defecto que elige el sistema operativo. El panel tiene un refresco de 60 Hz, y no se da cifra del tiempo de respuesta.
El acabado es en mate, así que los reflejos no darán problemas, pero perjudica a la calidad de color y nitidez frente a los acabados en brillo que suelen ser más caros. En el terreno del color no se le puede poner ninguna pega porque además reproduce color a 10 bits (8+FRC). Alcanza los 350 nits de brillo máximo en toda la pantalla, con un contraste estático de 1200:1.
| Triple Aero 15.6 Pro Max de Aura Displays | |
|---|---|
| Pantalla | tres pantallas de 39.5 cm (15.6 in) IPS, 1920 × 1080 px, 60 Hz |
| Tamaño | 420 mm × 360 mm × 30 mm |
| Peso | 3.2 kg |
| Color | 8 bits |
| Espacio de color | 98 % sRGB |
| Brillo máx. | 350 nits, 450 nits HDR (10 % del panel) |
| Contraste | 1200:1 |
| HDR | compatible |
| Refresco adaptable | no |
| Conectores | un USB tipo C de carga 65 W, un USB tipo C para vídeo, tres mini-HDMI |
| Recubrimiento | mate |
| Fuente | externa |
| Extras | altavoces de 2 W |
| PVPR | 609.95 euros |
| PVP | 522.95 euros |
Uso
No entro a valorar en profundidad la calidad del panel porque carezco de las herramientas para ello. Para probarlos bien se necesitaría una inversión de miles de euros en equipamiento y software especializado, y aunque me gustaría, me resulta inviable. En su lugar he usado una herramienta buena como es el Colorchecker Display Plus de Calibrite, entre otras baratas, pero solo pruebo con ella una parte de la calidad. Junto a ella he usado su programa de calibrado que sirve para hacer algunas comprobaciones de color y uniformidad, y otras comprobaciones desde web y otras herramientas para ver píxeles muertos, estelas y otros detalles que son los más importantes para la calidad de uso.
De todas formas no me gusta entrar en análisis muy técnicos de cosas como los monitores porque eso solo conforma artículos para los más sibaritas. Un monitor de 400 euros tampoco está orientado a un comprador que quiera lo mejor de lo mejor de lo mejor. Lo que creo es que es más útil para la inmensa mayoría de usuarios determinar si el monitor sirve bien para su precio y características, lo cual cae más en la parte de percepción humana y no en la de poner números objetivos que realmente no dicen al final si un monitor es apto o no para su uso por un usuario cualquiera. Para determinarlo uso mi criterio profesional de diseñador gráfico por haber trabajado bastantes años de ello ya que me precio de tener muy buen ojo para temas de color, además del sentido común para determinar otras cosas.
Menú
El menú de configuración es sencillo y directo al grano, porque al final son paneles generalistas y lo único que interesa son las opciones de modificación de la calidad del color. También permite mover el menú de sitio porque por defecto está situado en el centro de la pantalla donde se pondría el calibrador en muchos programas.
Color
Calibrado a unos 120 nits, el panel abarca el 115 % de la escala de color sRGB, el 79.2 % de la Adobe RGB y el 81.4 % de la DCI-P3. Esto es importante por si se sube el brillo, ya que en ese caso el volumen disminuye y la cobertura del color no podría llegar al cien por cien. En la práctica, la cobertura real a 120 nits es del 97.5 % de la sRGB, el 77.6 % de la Adobe RGB y el 80.4 % de la DCI-P3.
Así que para un uso profesional no son los mejores paneles, y el proceso de calibración no va a ayudar. Es muy complicado calibrarlos a una calidad decente, y puede llevar horas conseguir dar con los parámetros adecuados. En la ocasión que más cerca se ha quedado de tener una calidad de color, brillo y contraste cercana a la pantalla del portátil que he usado con ellos, el volumen de sRGB bajó al 93 %.
Es complicado calibrarlos y va a ser un proceso que lleve tiempo. Pero al final, salvo que se haga diseño web o de otro tipo en el que sRGB sea importante, no sirve para edición fotográfica, de vídeo u otros. Es un triple monitor generalista, para usuarios generalistas, y no para profesionales, y aun a riesgo de ser pesado, quiero dejarlo muy claro que no se van a poder usar como acompañantes en condiciones de un MacBook.
Para calibrarlo hay que recurrir al modo manual de Callibrite Profiler con 400+ parches de color —o sea, casi diez minutos de calibrado—, ajustando el contraste, brillo y color en lugar de dejárselo al programa. También tuve que reducir la retroiluminación, un parámetro infrecuente en los monitores, al 30 % desde el 50 % para conseguir que las imágenes no se vieran tan claras. Aun así, la temperatura de color es complicado acercarla a 6500 ºK, y lo más cerca que me he quedado es de unos 8000 ºK. La calibración en DisplayCal es básicamente imposible porque la temperatura de color se queda en torno a 9000 ºK, y precisaría de dedicarle mucho tiempo más para calibrar las pantallas.
Brillo y contraste
El brillo de los monitores se sitúa en torno a los 350 nits de máximo, y con su acabado en mate se podrán usar sin problemas en cualquier sitio incluso con luz más intensa que no se pueda controlar su posición. En cuanto al contraste, la compañía indica que es 1200:1 y efectivamente lo alcanza sin problemas. Así que en general el contraste aporta un granito de arena imprescindible para que tenga una calidad de color adecuada al uso que tienen.
Tiempo de respuesta
El tiempo de respuesta de los monitores es bastante normal, y probablemente esté en torno a los 10 ms. No es malo, pero tampoco como para tirar cohetes. En pruebas como la de Ovni de Blur Busters se notan ciertas estelas propias de su alto tiempo de respuesta, pero no molestará nada en el uso generalista al que están orientados estos monitores.
Uniformidad
La uniformidad de este tipo de paneles de pequeño tamaño suele estar bien a estas alturas, y en este caso no es distinto. No se aprecian zonas más claras u oscuras que otras en ninguno de los tres paneles en los que, por lo demás, dan la misma sensación de uso. Realmente no hay nada que mencionar en este apartado.
Nitidez de texto
La nitidez del texto está bien por la distancia a la que se va a usar. Son pantallas FHD de 39.6 cm, usadas a unos 60 cm, con una densidad de 142 PPP, por lo que la nitidez va a estar bastante bien. No he notado problemas en este terreno en el día a día tanto en Windows como en macOS, y no hay nada que decir sobre ello.
Altavoces
Este monitor incluye un par de altavoces de dos vatios, y en la práctica resultan muy útiles para ahorrar espacio en el ¿escritorio? Bueno, el triple monitor ocupa bastante, y habría espacio de sobra por detrás para poner unos altavoces mejores, aunque los de este triple monitor están suficientemente bien. Son mejores que los del típico monitor de 100 o 150 euros. Tienen los habituales problemas con los graves, pero para solucionarlo habría que comprar unos altavoces de sobremesa bastante caros. Así que los altavoces están bien. El volumen se puede controlar rápidamente desde los botones de control.
Conclusión
El Triple Aero 15.6 Pro Max es un interesante multimonitor de fácil transporte y despliegue, aunque se necesite unos 36 cm por detrás del conjunto para poder usarlo. Eso puede hacer que en muchas mesas sea impracticable desplegarlo, porque sumado a los 30-35 cm de un portátil significa que se necesita una mesa de al 70 cm para usarlo, y eso con el espacio justísimo como para usar de manera cómoda el portátil. Es lo primero a tener en cuenta de este diseño, que no va a ser práctico para muchos.
La puesta en marcha del monitor no es complicada. Hay que instalar el controlador indicado, el SM76x de Silicon Motion, y a partir de ese momento Windows y macOS lo detectarán bien. Lo he probado en un portátil con Windows, un macOS de procesador de Intel con macOS 26 en el que no ha funcionado —esta versión está en beta y los controladores no son compatibles—, y en un Mac Studio con procesador Apple en el que ha funcionado sin problemas.
El problema que le veo es que son tres paneles para un uso general. La temperatura de color que desear tal como viene con un cierto toque azulado, el panel tiene bastante brillo de fondo y es complicado calibrarlos para un uso profesional. Por el precio, creo que podrían haber sido paneles mejores. Pero para un uso general, las pantallas no tienen mayor problema, aunque se van a perder tonalidades por un evidente clareo del color en general que es complicado de corregir.
Sobre la calidad de fabricación, en general está bien, con una estructura de aluminio, pero he tenido problemas con los botones de control. Al principio pensaba que no tenía porque lo que eran botones no se movían. Tras comprobarlo y ver que tenían que ser botones, los empecé a mover con la uña y se desencajaron, funcionando como botones. Pero de manera recurrente, al usarlos se han quedado otra vez enganchados, teniendo nuevamente que moverlos un poco con la uña para desengancharlos. En un producto de este precio, eso no debería de ocurrir.
Al menú de gestión se acostumbra uno rápidamente, y habrá que usarlo bastante para ajustar los tres paneles. Podría haber alguna opción para copiar los ajustes de uno a los otros dos porque al final son paneles de calidad prácticamente igual, y por tanto simplificaría la calibración.
En general, me parece un triple monitor práctico, de calidad de imagen comedida, pero en la línea de lo que se consigue en el mercado con productos similares de otras marcas. Si se quisiera lo mismo para profesionales, podría costar hasta el doble, porque al final los monitores portátiles son más caros. No porque tengan alguna tecnología más cara, sino porque se venden poco y son de nicho de mercado. Pero lo que ofrece Aura Displays me parece bueno, y el precio está bien para lo que aporta, aunque hay que ser un tipo de usuario muy específico para sacarle utilidad.