El sector de los estudios de videojuegos se está consolidando con la compra por parte de las grandes editoras de los estudios más pequeños. Con los costes de producción de juegos disparados es normal que estas empresas busquen la viabilidad económica bajo el paraguas de una gran compañía como Microsoft o Sony, las cuales son las que más compras están realizando en los últimos tiempos. La última adquisición es la de Housemarque que pasa a ser parte de PlayStation Studios.
Housemarque es la desarrolladora de éxitos antiguos como Stardust y más recientes como Returnal —dependiendo de a quién preguntes, como siempre—, más otras decenas de títulos entre medias que ha desarrollado en sus veintiséis años de historia. Housemarque destaca la estabilidad que van a tener para desarrollar sus próximos juegos, y seguirán haciéndolo desde Helsinki (Finlandia).
Vía: SlashGear.