La semana pasada Google puso a la venta su dispositivo de streaming Chromecast en España, una alternativa para su propio ecosistema de Android y Chrome. Mucho se está hablando de él, sobre todo después de la actualización que permite enviarle contenido desde cualquier aplicación que incluya compatibilidad con él y no sólo desde unas pocas opciones de Google (actualización que lo ha convertido en un producto interesante), pero, ¿qué nos proporciona exactamente?

Qué es Chromecast

Chromecast es un dongle HDMI que se puede conectar a una televisión para enviarle contenido multimedia desde cualquier dispositivo o aplicación compatible. Esto incluye algunas apps para Android e iOS, y el navegador Chrome de Windows y OS X.

Tiene un precio de 35 euros, y a primera vista puede resultar una alternativa barata para convertir nuestra televisión antigua en un centro multimedia. Una vez abierta, veremos en la caja del Chromecast el pequeño dongle, un pequeño cable prolognador HDMI por si la ranura de nuestro monitor/televisión está poco accesible, y un cable miniUSB a USB y un cargador para alimentar el Chromecast.

Toma de contacto

La configuración de Chromecast se puede realizar a través de nuestro PC, teléfono Android o iOS, accediendo a una URL especial en el navegador e instalando la aplicación que nos indique. Una vez que seleccionamos el Chromecast que queremos configurar, podremos añadirle la red WiFi en la que queremos que esté incluida, y a partir de ese momento, y después de que termine de descargar e instalar las actualizaciones necesarias, podremos empezar a utilizarlo.

Al nagegador Chrome tendremos que añadirle una extensión que nos permitirá enviar a la televisión el contenido de cualquier pestaña. Es una opción muy interesante ya que también mostrará la reproducción de un vídeo a pantalla completa, como los de Hulu. Hay servicios de vídeo en el que nos dará la opción de enviarle el vídeo a Chromecast desde el propio reproductor flash, y lo que hará será reproducirlo directamente de Internet. Por ejemplo tenemos en esta categoría a YouTube y Netflix.

El primer problema que le he visto al Chromecast es que sólo reproduce vídeo a 720p desde las pestañas del navegador de nuestro PC o el contenido que enviemos desde el ordenador, y no he conseguido que coja los vídeos de YouTube a 1080p. En la época en la que estamos, me parece insuficiente, ya que hay alternativas como Roku o el Apple TV que nos permitirán hacerlo a 1080p. Además, nos veremos obligados a alimentarlo con el enchufe en vez de a un puerto USB de la televisión por que de otra forma la imagen dará botes, por lo que su pequeño tampoco deja de ser una ventaja. Otro punto negativo (y van tres, pero importantes) es que el WiFi que incluye Chromecast no es especialmente bueno, y puede dar problemas de buffer de vez en cuando.

La reproducción desde otras aplicaciones, como por ejemplo Plex, las hace a 1080p aunque muchas veces da la sensación de que hay una pérdida de calidad si lo comparamos con la reproducción del mismo contenido a un Apple TV, además de que pega pequeños botes la imagen de vez en cuando o no va todo lo fluido que debería. Habrá muchos usuarios que no noten la diferencia entre 720p y 1080p, también dependerá del tamaño de la TV y de la distancia a la que estemos, o que no aprecien esos saltos de imagen, pero en mi caso sí que noto esa diferencia.

¿Por qué es tan importante el ver el contenido de las pestañas a 1080p? Pues simplemente para poder ver cualquier vídeo de Internet en máxima calidad en la televisión. Por ejemplo, esto permite ver Hulu o Netflix en la televisión desde fuera de EE.UU, y el contenido de otros servicios como Yomvi si no disponemos de una Smart TV. Es una limitación en calidad de imagen difícilmente justificable.

Opciones, opciones

A pesar de los "inconvenientes", la reproducción funciona bien en una red casera que disponga de un buen router y que esté en la misma sala que el Chromecast, y no el router que nos den por defecto Orange, Movistar o quien sea nuestra operadora. Debido a que el Chromecast se inserta por detrás de la televisión, en ciertos salones puede provocar que el WiFi conecte a velocidades menores de las recomendables, según tipo de 802.11 que disponga el router.

Se echa mucho en falta a la hora de reproducir contenido de, por ejemplo, YouTube botones o un mando o similar para pausar, retroceder o detener la reproducción del vídeo una vez que se ha enviado el contenido a Chromecast. Este apartado está todavía pendiente por parte de Google. Se agradece, aunque no funcione especialmente bien, la posibilidad de transmitir el contenido completo del escritorio. No llega a poder usarlo como monitor externo (debido a problemas de lag y baja resolución), pero si consiguen evolucionar esta tecnología sería un plus para el Chromecast.

Hay una creciente cantidad de aplicaciones que dan soporte a Chromecast, como Plex y otros reproductores de contenido, disponibles tanto para iOS como para Android. Es un sistema multiplataforma, y es por lo que más destaca este producto.

¿Qué nos ofrece Chromecast?

Chromecast está lejos de ser perfecto. La WiFi podría funcionar mejor, y al no disponer de conexión para un cable Ethernet muchos usuarios que ya hemos probado y tenemos en casa dispositivos de streaming sabemos que es la única opción para ver siempre perfectamente el contenido que leemos/enviamos desde nuestro PC. Ya sea con una Raspberry Pi, un Apple TV (jailbrekeado o no), u otros dongles. Se echa en falta en Chromecast compatibilidad con Miracast.

Por eso hay quizás opciones mejores en el mercado que Chromecast, pero en el terreno de los dongles no son mucho mejores, y posiblemente sean peores por un precio igual o ligeramente inferior. Está muy lejos de hacerle sombre al Apple TV para los que usen iOS, ya que sí reproduce 1080p sin problemas, su conexión WiFi es mucho mejor, y además dispone de más canales de contenido directamente en la televisión (aunque fuera de EE.UU no sean interesantes muchos más allá de Vevo, YouTube o el canal de tráilers de iTunes, entre otros). Tener un Mac es un extra, ya que el Apple TV permite usar una televisión como monitor externo, con obviamente más posibilidades que el usarlo simplemente para reproducir una pestaña de Chrome.

Google ha conseguido un éxito con Chromecast debido a que ha popularizado el dispositivo entre aquellos usuarios que no están realmente muy metidos en la creación de sus propios media centers caseros. Chromecast elimina, como los dispositivos similares, la necesidad de tener uno. Pero la verdad es que si tenéis una smart TV de LG o Samsung, que pueden reproducir el contenidos de los servidores multimedia de aplicaciones como Plex, la utilidad del Chromecast se hace todavía más difuso para los usuarios.

Este último escenario es en el que me encuentro, y eso que tengo un Apple TV y tengo un Mac. Adquirí hace poco un smart TV de LG para el salón, dejando de lado mi antigua tele, y he vuelto a activar el servidor de contenido de Plex y jubilado el Apple TV. En mi casa poco espacio tengo para Chromecast. Siendo realistas, poco uso voy a darle a lo de reproducir un vídeo de YouTube de mi teléfono a mi televisión cuando estoy en casa, por que hay muchísimas más posibilidades de que las vea en el PC. Lo mismo ocurre con las fotos.

Puede resultar interesante si tenemos visitas para que reproduzcan su contenido, ya sea música o fotos, pero en lo que es el día a día no le daría uso a un dispositivo de streaming como Chromecast. En mi caso, el no disponer de una buena reproducción a 1080p es un gran argumento en su contra.

Conclusión

Chromecast no es un mal producto de Google, pero puede llevar a engaños a una buena cantidad de posibles compradores si no se informan debidamente con antelación a su compra. Su utilidad dependerá, como he dicho, del sistema de streaming/media center que tengamos montado en nuestras casas, aunque también puede ser útil para ese típico monitor con entrada HDMI que tenemos algunos al lado de nuestro ordenador para la PlayStation/Xbox/ver películas/ver la tele. Por eso cada usuario tendrá que valorar si, con las prestaciones que he comentado que tiene, le sirve para su caso particular.

Puntuación

7.8

sobre 10

Lo mejor

  • Versatilidad y multiplataforma
  • El precio: 35 euros

Lo peor

  • Le queda mucho trabajo a Google para convertirlo en un buen stick de streaming
  • Su antena WiFi no da una buena fiabilidad
  • Tiene problemas para reproducir a 1080p ciertos contenidos
Conectividad
7
Calidad de imagen
8
Software
7.5
Calidad/precio
8.5